Circulante es la liquidez monetaria que significa patrimonio, pero no es permanente, siempre está en circulación, al igual que la información. En esta obra Edith Morales propone una manera de orientarse y determinar la posición de uno en el mundo a partir de alternativas a lo que se utilizan como instrumentos del pensamiento, a través de un ejercicio conceptual.
La obra utiliza sobres de estados de cuenta que cada mes traen la información de la liquidez de una cuenta bancaria, los cuales han demarcado un recorrido que se percibe como experiencia y conjetura, donde la correspondencia sustraída de sus particulares como lo son el emisor, receptor, la ruta y destino, despiertan una nueva cartografía de emplazamiento.
A partir de los desdobles el interior de los sobres, decorados con patrones y diseños cuyo objetivo es ocultar la información de los documentos contenidos dentro, quedan al descubierto por lo que es preciso recurrir a otras formas de percepción, ejercicio propuesto por la artista en la cual el sobre sirve como soporte para trazar otras rutas que ha realizado durante su vida productiva.
A manera de collage el trayecto que se realiza cada día para llegar al lugar de trabajo, el tiempo espacio invertido trazan las rutas, recorridos, deambulaciones que acompañan en cada imagen con sellos de distintas fechas significativas en la vida personal de la artista. Cada distancia, cada tiempo y espacio aun cuando rutinariamente se realice es único e irrepetible, nos permite entenderla como un mapa expuesto al azar y a las circunstancias, como la energía empleada en cada circular o trayecto de vida personal.